Al fin le llego a Scorsese su recompensa, su
reconocimiento con la estatuilla dorada llamada “Oscar”, pero que le venga con
“Infiltrados”, a mi parecer no es lo más correcto, repasando su filmografía se
ve claramente productos superiores al mencionado. De todas formas “Infiltrados”
no es mala para nada, todo lo contrario, es entretenida gracias a la gran carga
de suspense que contiene a lo largo de su metraje, e impactante por su final.
Tal vez aplicaron la teoría de Robert McKee “Te contaré un secreto… el final
hace la película, gánatelos al final y tendrás un éxito”, os suena
¿verdad?
Y menudo desenlace, William Monahan ganaría el Oscar al mejor
guion adaptado por “Infiltrados”, pero en mi humilde opinión, el mérito y los
honores deben ser para los guionistas Siu Fai Mak y Felix Chong, responsables de
“Infernal Affairs”, película que ha servido a William para realizar el remake
americano. Lo he comentado muchas veces, Hollywood está sin ideas, hacer
secuelas, remakes o adaptaciones es el recurso fácil y rápido que ha encontrado
la industria para invertir su dinero con resultados positivos, hay excepciones,
pero aun así, teniendo fracasos, la balanza se inclina a su lado, dándoles la
razón.
Pero para no divagar, me centraré en la peli en sí. En lo que a
guión se refiere, la adaptación de William es notable sin llegar a
sobresaliente, debido a pequeños detalles que hacen que la historia se desvíe de
su curso en algunos momentos, como ejemplo de ello, puede ser tranquilamente la
incorporación de la psicóloga, interpretado por Vera Farmiga. El triángulo
amoroso que montan Damon – Farmiga – DiCaprio sobra por completo, ya que
su aportación hace que la película fluctué en su ritmo. Aun así, todo está muy
cuidado, los diálogos llenos de fuerza (solo hay que ver la entrevista entre
Sheen, Wahlberg y DiCaprio). Lo divertido de la historia, es como William se
divierte con el juego del “gato y el ratón”. Cada uno con sus oportunidades para
pillar al otro. Pero no es hasta ese final tan radical, un giro tajante, tal vez
parezca que corte por lo sano, dejando al espectador descolocado. Pero recordar
es fruto de la original “Infernal affairs”, y es que, el que haya visto ésta y
luego vea “Infiltrados” verá que la mayoría del metraje es calcado, dejando un
poco en duda la creatividad de William.
Quitando estos detalles, la película de Scorsese es genial, se
nota que está en plena forma. Sus anteriores trabajos, “Gangs of New York” y “El
aviador” me dejaron un amargo sabor de boca. Pero con este nuevo trabajo
recuperamos al Scorsese que nos muestra personajes duros y ambiguos. Vuelve con
su mafia, esta vez los italianos se vuelven irlandeses. Pero que nadie se
confunda, “Infiltrados” no trata de la mafia en sí. El eje de la historia es lo
que ocurre en el departamento de policía, la corrupción dentro de ese mundo que
se “supone” puro. De ahí, ese plano final tan significativo.
Desde el comienzo del film, cada secuencia, cada plano, respira
esa inconfundible marca de la casa. La presentación de los personajes, Nicholson
y al protagonista de la historia en su infancia, Damon, que después se
convertirá en el infiltrado. Caracterizado por el buen gusto de la música que
tiene el autor, el tema de los Rolling Stones “Gimme Shelter”, un ejemplo entre
tantos del sello del autor.
Para concluir, resaltar la labor ejemplar de los actores.
Porque si por algo es buena la película del realizador de “El cabo del miedo”,
es por su reparto. Nicholson que ni se esfuerza por actuar (impresionante la
actuación que mantiene en el bar con DiCaprio). Damon cada vez más maduro y un
correcto DiCaprio, aunque tengo que admitir que DiCaprio es como el buen vino,
mejora con los años.
Con una buena base argumental, Scorsese al mando y con estos actores, la película ya está más que arropada. Pero si encima añadimos unos secundarios de lujos, como un recuperado Martin Sheen (papel ofrecido a De Niro, que lo rechazo por problemas de agenda), un Mark Wahlberg que se pasea por la pantalla con esplendor, y otro recuperado como es Alec Baldwin (lástima que su época dorada no hubiera sido más larga) que disfruta con su personaje demostrando el buen actor que es, y que Hollywood no debería de echarlo en falta. No me olvido del único personaje femenino, Farmiga, ni molesta ni agrada, simplemente una más del montón.
Y por muchos Oscars que le cayeran. “Infiltrados” es un film
muy correcto, muy bien coordinado y realizado, con sus altibajos, pero aun así,
una película muy recomendable, intrigante y llena de tensión o suspense, y lo
dicho, con un final sorprendente (no magistral). Así es Hollywood y así se lo he
contado.